LA INFORMACIÓN EN LA RED

En Internet podemos encontrar información muy variada: estudios monográficos, actas de congresos, leyes, estadísticas, noticias de actualidad, bases de datos, directorios e informes de empresas e instituciones... Mucha de esa información está disponible también en medios impresos, pero cada vez más hay información que sólo está disponible en la red.

Se suele comparar Internet con una gran biblioteca, pero mientras que cualquier biblioteca dispone de un catálogo donde se recogen de forma ordenada todos sus fondos, esto no existe en Internet, por lo que debemos recurrir a una amplia variedad de recursos para realizar búsquedas.

Por otra parte, y puesto que la información que se publica en Internet no está sometida a ningún tipo de examen previo por parte de editores o profesionales del sector, ni a normas de calidad de ningún tipo, la información obtenida de la red debe ser sometida a un riguroso análisis (autoridad, actualización de los contenidos, propósito, funcionalidad, etc.) que nos asegure la fiabilidad de la información.

Estas páginas pretenden proporcionar algunos consejos para buscar, filtrar, organizar, producir y compartir información en Internet de forma eficaz y eficiente, así como para valorar la calidad de la información encontrada.

Buscar: Una de las primeras referencias que tenemos de Internet y su utilidad pasa por la realización de búsquedas. Realizar búsquedas bien definidas nos permitirá economizar esfuerzos y ser más eficaz. El uso de funciones avanzadas de búsqueda o de motores adecuados (metabuscadores, multibuscadores,…) resulta fundamental.

Filtrar: Para filtrar los numerosos resultados que podemos obtener de nuestras búsquedas es preciso no perder de vista nuestro objetivo: inserción laboral. Tendremos en cuenta solo los resultados que puedan servirnos. Además, localizaremos fuentes de información clave (webs de referencia, canales RSS,…) como base para una permanente actualización.

Organizar: Es conveniente disponer de herramientas que faciliten una ágil estructuración de nuestros contenidos y recursos. Un espacio de trabajo en el que podamos visualizar y asimilar nuestros resultados (navegadores personalizados, agregadores, etc.).

Producir: La Web 2.0 dispone de abundantes recursos creativos. Podemos crear contenidos propios y compartirlos con otras personas que tengan intereses afines a los nuestros.Espacios de reflexión y trabajo colaborativo están a nuestra disposición (blog, wikis,…).


Compartir: Una de las características más importantes de esta Web 2.0 se encuentra en las posibilidades de compartir e interactuar con otras personas. Las redes personales y profesionales facilitan esta interacción (Facebook, Twitter, Linkedin, etc.). Aunque nuevamente es conveniente racionalizar el uso de estas redes y adaptarlas a nuestro objetivo.